Un relato.

Tan solo un beso de tus labios, es lo único que pido, ni siquiera amor, cariño o afecto. Solo un beso, pero tu no me lo das. -Te quiero mucho, te aprecio, eres alguien muy importante para mi, es una suerte tenerte a mi lado. ( 5 am ring-ring-ring )-Hola preciosa, que haces despierta a estas horas??
( silencio, después llanto al otro lado de la linea) -Estabas dormido??.
- Si.
-Te dejo que sigas durmiendo.
-No díme, si llamas es por algo? por que lloras? ha pasado algo?.
-No, mañana hablamos.
-He preciosa no llores y díme que pasa, sabes que no me gusta verte llorar.
-Lo he vuelto ha hacer
-(0_o) Que? otra vez?
-Ha intentado pasarse conmigo, solo quería....
-Tranquila, estas en casa?.

De camino a tu casa recuerdo. Recuerdo haber salido con intención de ir a casa, poner música y descansar, por el camino tropezaste conmigo, y caísteis al suelo, el vino y empezó a insultarte, tu llorabas, pensé en apartarme y seguir mi camino, pero algo en tus ojos me llamo la atención, te levante y el te empujo, no comprendía el por que, pero me metí en medio, el dudo y me amenazo, pero se retiro y se fue llamándote puta. Tu no parabas de llorar tenias los ojos rojos y la rodilla magullada, te pregunte tu nombre, te pregunte que había pasado y lloraste de nuevo, asegurabas estar bien, pero en aquel momento no podía imaginar nada mas frágil que tu. Fuimos a tomar un café, dejaste de llorar y hablamos durante horas, salimos y caminamos, me dijiste que no te querías ir sola a casa, así que vinisteis a la mía. Una vez en mi casa seguimos hablando hasta despuntar el alba, nos quedamos dormidos en el sofá, uno junto al otro, al despertar tomamos un café y nos dimos el teléfono, pensé que no volvería a saber de ti, pero comenzamos una extraña amistad, que ya dura cinco años. En estos cinco años jamas pensé que pudiese llegar a sentir algo por ti, pero en algún momento esto sucedió.

Al llegar y verte, igual de frágil que aquel primer día, he sentido rabia, impotencia, culpabilidad. He preparado café y hemos hablado de temas triviales, incluso cotilleos, y te he visto sonreír otra vez, una sonrisa fugaz, pero la he visto y tu lo sabes. hemos ido al salon, has sacado un viejo disco de baladas y puesto musica. Nos hemos sentado en el sofá, uno frente al otro. No he llegado a preguntar, pero tu me has respondido igualmente, me has contado lo sucedido, solo querías bailar, el te ha metido mano, os habéis besado y el ha querido mas. Te ha llamado puta otra vez. Lloras, te acercas a mi y me abrazas, continuas con la historia, te ha llamado por teléfono, te ha pedido perdón, te ha invitado a cenar esta noche a modo de disculpa y lo has aceptado. Le odias, pero eres incapaz de alejarte de el, en el fondo le quieres. Has dejado de llorar.

Hace tiempo que el disco se ha acabado, pero ninguno se ha levantado a cambiarlo, ni siquiera hemos dado al "play" otra vez, estamos en el sofá, con su cabeza apollada en mi pecho, mi brazo rodeándola, no me atrevo a decir nada, temo que la "magia" del momento se rompa. Suena el teléfono y es el, duda unos segundos, pero lo descuelga. No aguanto mas, la ira se apodera de mi, pero el miedo me deja paralizado, no puedo reaccionar, escucho la conversación, el va a venir a su casa. Ella me mira, yo sigo en la misma postura, intenta justificarse, pero no la dejo, no hacen falta explicaciones, ella le quiere, le doy un beso en la frente y me despido.
-Estas segura?
-.....No lo se....
-Llámame ok?
-......
-Ok?
- Vale

Me siento miserable, cobarde. Son las 12 de la mañana, hay un radiante sol de primavera, pero yo solo veo tinieblas, me cruzo con el, no me ha visto, lleva unas flores, me doy la vuelta y pienso en llamarle, hablar de forma poco amigable con el, pero no puedo, es su decisión y debo respetarla, aprieto los puños y sigo mi camino. Mientras regreso no puedo dejar de pensar, de reprocharme mi propia cobardía. Siempre dices que el quieres un hombre que te quiera, que te trate bien, que te respete, dices que no lo encuentras, que no existe, que siempre terminas con perdedores, chulos egoístas.... Donde me deja esto a mi?, y con este pensamiento he llegado a casa, me ha parecido fría, solitaria, demasiado grande....

Durante días pienso lo ocurrido, Tal vez... si le hubiese dicho algo... si le hubiese dicho lo que siento.... ahora estaríamos juntos. No ni de coña, para ella solo soy su amigo, no soy un hombre, me siento como un animal de compañía, siempre esta hay, siempre raudo a la llamada de su amo..... Hasta que me doy por vencido, la he perdido por cobarde? o por que ella quería a otro? Ya no importa, Llevo 2 semanas sin saber de ella. ( 5 am ring-ring-ring )-Hola preciosa, que haces despierta a estas horas?? ( silencio, después llanto al otro lado de la linea) -Estabas dormido??.........

FIN